El poder de las palabras.

Mientras veo la lluvia lavar las turbias calles de mi ciudad recuerdo que estás a miles de kilómetros y muero de ganas por volver a sentir tu respiración en mi espalda y quiero volver a escuchar tus ronquiditos mientras te veo dormida.

 Nos construimos a pasos agigantados porque apostamos por esto, sabemos que debemos queremos querernos, disfrutamos hacernos sentir rico cuando tenemos ganitas de nosotros y dialogamos directamente para nos desnudamos el alma.

Compartimos gustos, inquietudes y curiosidades. Resumo lo nuestro así: me atrapó tu gusto por las palabras, nos gustan las palabras, nos gustamos y queremos sentirnos.

Las palabras y vos son esos frasquitos que guardan esencias especiales y por lo tanto es tratarlas amorosamente y consentirlas para verlas florecer
.

Dos palabras encierran tantas cosas. Cinco letras, un espacio, seis caracteres y un lenguaje de señas explican lo que siento por vos. El poder de las palabras hace temblar estructuras, rompe esquemas, derrite témpanos y derrumba barreras.  Te regalo palabras para que adornés tu vida, te entrego mi idioma porqué es lo único que te puede satisfacer.

Dos palabras, un beso, manos entrelazadas y dos corazones que se quieren amalgama, eso es para vos, tomalo.